Skip to main content

5 claves para que tu campaña de marketing digital sea un éxito

Si buscamos que nuestro negocio tenga buenos resultados o crezca, estar en el mundo digital ya no es una opción, sino una obligación. Y es que, como se recoge en el estudio Digital 2022 de We Are Social y Hootsuite, el uso de internet alcanzó nuevos máximos el año pasado. De hecho, al inicio del año había 4.950 millones de usuarios, lo que corresponde al 62,5% de la población mundial.

Newsletter

Suscríbete para estar al día de todas las novedades y tendencias en marketing y publicidad

Sin embargo, diseñar una estrategia digital y que esta tenga éxito no siempre es fácil. Y es que hoy en día nos enfrentamos a múltiples problemas que deberías conocer para poder afrontarlos con éxito:

  • Una gran competencia en internet. El gran volumen de información y de empresas que hay en la red haen que sea más complicado conseguir clientes.
  • Ya no se compra en el primer sitio web que visitamos. Esta elevada competencia lleva al usuario a buscar en más páginas web y a comparar entre ellas.
  • Las estrategias a corto plazo ya no funcionan. Es complicado conseguir clientes de un día para otro, diseñar una estrategia a medio o largo plazo te dará mejores resultados.
  • Si no estás en el Top 10 de Google, no existes. Los usuarios no suelen pasar a la segunda página de Google cuando realizan una búsqueda, por ello es importante trabajar en el posicionamiento SEO.
  • Es más importante retener que atraer. La mayoría de tu tráfico se irá de tu web a los pocos segundos de entrar en ella, por ello, diseña tu estrategia con el objetivo de retener y convertir.

Pero no te preocupes, en este post te contamos algunos consejos para que tu campaña de marketing digital sea un éxito:

1. Diseña y planifica tu estrategia de marketing digital. Es la parte más importante porque de ella depende que se cumplan tus objetivos. Presta atención a estas claves para diseñar una buena estrategia:

  • Define tu posicionamiento. Lo primero que tienes que hacer es responder a estas preguntas: ¿cómo es mi marca? ¿cuál es mi competencia? ¿en qué me diferencio de ella? ¿cuáles son mis puntos fuertes y débiles?…
  • Fija tus objetivos. Estos son una parte fundamental de una estrategia de marketing, ya que nos permiten saber si estamos consiguiendo o no los objetivos marcados en nuestro plan. Asimismo, es importante que estos vayan alineados con los objetivos de negocio de la empresa. La metodología SMART nos ayuda a definirlos, por lo que estos tienen que ser: específicos (Specific), medibles (Measurable), alcanzables (Achievable), relevantes (Relevant) y definidos en el tiempo (Time Bound). También es importante que una vez definidos, establezcamos métricas para conocer si vamos por buen camino.
  • ¿A quién me dirijo? Es importante que primero definas quién es tu público y diseñar la estrategia teniendo en cuenta su comportamiento y los espacios digitales en los que se encuentra.
  • Comunícate con tu público. La comunicación con nuestra audiencia es esencial para conseguir su interés y conversión. Define en qué canales te vas a comunicar con ellos, con qué mensajes y formatos, y si vas hacer alguna acción concreta para captar su atención.

2. Cuenta con una página web que convierta

La página web es nuestro escaparate al público, por lo que es muy importante que no solo esté bien construida y sea atractiva, sino que esté pensada para convertir. Para conseguirlo, tienes que trabajar en estos cinco puntos:

  • Usabilidad. Los usuarios tienen que encontrar de forma rápida y sencilla lo que buscan, si tardan mucho en hacerlo se irán y no volverán.
  • Arquitectura web. Una buena estructura de nuestra página web (Home y los menús de navegación) ayudará a los usuarios a encontrar fácilmente la información que buscan.
  • Una web reponsive. Nuestra página web tiene que ser visible en dispositivos móviles y tablets.
  • Diseño atractivo. Un buen diseño es importante para generar interés en nuestros potenciales usuarios.
  • Con llamadas de acción. Las populares Call To Action son fundamentales para llamar la atención de nuestro público y conseguir su conversión. 

3. Mide constantemente para tomar decisiones y analiza tus resultados

Peter F. Drucker, consultor y profesor de negocios, decía “lo que no se puede medir, no se puede mejorar”. Y es que medir constantemente lo que estamos haciendo es fundamental para que la campaña de marketing digital funcione. Y es que si no disponemos de información relevante, no podemos tomar las decisiones correctas. Analiza qué es lo que funciona y lo que no según los objetivos marcados en tu plan de marketing digital y toma las medidas necesarias para mejorar los malos resultados e impulsar los buenos. Actualmente, disponemos de muchas plataformas que nos facilitan métricas muy relevantes como Google Analytics, las propias analíticas de las redes sociales o Semrush, entre otras.

4. Cuenta con un presupuesto flexible 

A la hora de elaborar el presupuesto de marketing es importante que tengamos en cuenta que gastar más dinero no es sinónimo de obtener mejores resultados. Ante entornos cambiantes como el de los últimos años, es necesario que nuestro presupuesto en marketing digital sea flexible. Por ello, es importante contar con una buena agencia de marketing digital que nos ayude a ir modificando la inversión realizada según el contexto y aportando soluciones creativas sin que esto afecte a nuestra estrategia ni al cumplimiento de nuestros objetivos.

5. Crea tu sistema de ventas

Para conseguir clientes es importante atraer tráfico de calidad. Para ello, hay que trabajar en el tráfico controlado (el que viene de las campañas de marketing de pago) y el no controlado (el que llega sin que haya una campaña de pago). Una vez llegue el usuario a nuestros canales, tenemos que conseguir leads. Estos pueden ser de varios tipos, que rellenen un formulario, que realizan una determinada acción o que compartan un contenido, entre otros. Cuanto más cualificados sean estos leads, más fácil será que pasen de potenciales consumidores a clientes.

Y ahora, ha llegado el momento de poner en funcionamiento nuestra estrategia e ir evaluando constantemente qué es lo que funciona y no para ir adaptándola y conseguir que sea un éxito absoluto.

Si te gusta nuestro artículo.
¡Compártelo!